Cómo estimular su psicomotricidad

La psicomotricidad juega un papel clave en un niño, esta contribuye a un correcto desarrollo de su inteligencia.

Sin embargo, este proceso es como una montaña rusa con sus subidas y bajadas en relación a éxitos y fracasos.

¿Qué hacer?

Enséñale actividades nuevas de vez en cuando y simples como: abotonarse y amarrarse los cordones, que además fomentan su independencia. Ellos aprenden por imitación así que, por ejemplo, el uso de los cubiertos es más fácil que lo aprenda observándote.

Hay todo tipo de juegos y actividades divertidas para ellos que estimulan su psicomotricidad fina y/o gruesa: hacer rompecabezas, pintar, hacer figuras con plastilina (masilla), jugar con una pelota, jugar a saltar, etc.

¿Qué no hacer?

No se debe caer en el estrés si tu hijo parece que domina cierta habilidad pero al otro día es como si no supiera, la constancia es la clave.

No lo fuerces a hacer algo que no le parece divertido o estimulante o cuando esté ya cansado de hacerlo.