Tener un hijo con Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDH) puede ser un desafío, pero es importante recordar que con la orientación adecuada, tu hijo puede aprender a manejar su condición y llevar una vida plena y feliz.
¿Qué hacer?
- Establecer rutinas: Por ejemplo, todos los días a la misma hora realizar la tarea.
- Reforzar conductas positivas: Alabar o premiar a tu hijo cuando cumple con una tarea.
- Fomentar la autonomía: Permitirle elegir entre dos opciones simples.
¿Qué no hacer?
- No castigar con gritos o golpes: En lugar de eso, buscar alternativas como retirarle un privilegio.
- No exponerlo a situaciones muy estimulantes antes de dormir: Por ejemplo, evitar ver la televisión en exceso antes de ir a la cama.
- No compararlo con otros niños: Cada niño es único y tiene su propio ritmo de aprendizaje.
Recuerda que cada paso que tomes para apoyar a tu hijo en su desarrollo marca la diferencia. ¡Sigue adelante y confía en ti mismo como padre/madre!